Citando a... Sarah Dessen

¡Hola pensadores! ¿Cómo se encuentran? Yo me encuentro bien y espero que ustedes también. Como les dije el día de ayer, hoy y mañana le dedicaremos las entradas a Sólo Escucha, y aunque no es el libro más profundo que he leído en mi vida, la verdad es que me ha gustado muchísimo por lo que nos enseña acerca de la sinceridad. Pero bueno, no me extenderé ya que esta no es una reseña, se trata de una nueva entrada en Citando a... y esta vez citaremos a Sarah Dessen, la autora de Sólo escucha y otras novelas juveniles muy vendidas.

He de añadir que a Sarah Dessen desde hace bastante quería leerla y, ahora que se me ha cumplido, la verdad es que no me siento para nada decepcionada. Antes de iniciar con la entrada en sí quiero pedirles un grandisimo favor: Déjenme en los comentarios algún libro que me recomienden. De cualquier género excepto terror y erótico. Bueno, ahora si, comencemos: 

Pero estaba empezando a darme cuenta de que lo desconocido no es siempre lo más temible. La gente que mejor te conoce puede suponer un peligro mayor, porque las palabras que dicen y las cosas que piensan tienen el riesgo no sólo de dar miedo sino también de ser verdad.

Página 77

-Bueno si te das cuenta -continuó-, la música une a la gente. Posee una fuerza increíble. Algo que dos personas totalmente distintas en todo lo demás pueden tener en común. 

Asentí, sin saber qué decir.

-Además -añadió, dejando claro que no hacía falta que yo respondiera-, la música es una constante absoluta. Por eso tenemos una conexión tan visceral con ella ¿sabes? Porque una canción puede llevarte instantáneamente a un momento o a un lugar, o incluso a una persona. No importa si todo lo demás ha cambiado en ti o en el mundo, esa canción sigue siendo la misma, justo como en aquel momento. Lo que es alucinante si te detienes a pensarlo.

Página 109

-Es sólo que... no siempre digo lo que siento.

-¿Por qué no?

-Porque la verdad a veces hace daño -respondí.

-Si -dijo-. Pero también las mentiras.

Página 123

El silencio suena demasiado alto.

Página 163

-Quiero decir que si alguien es un amigo de verdad, no pasa nada si tú o ellos se enfadan, y no cambian por eso. Es parte de la relación. Esas cosas pasan. Y se resuelven.

Página 167

La música -me contó- fue una vía de escape. Todo lo demás estaba cambiando o llegaba a su fin, pero la música era un recurso vasto, infinito.

Página 177

-Sólo escucha -dije.

-Sí, no pienses ni juzgues. Sólo escucha.

Página 182

Y ésa era la cuestión. Antes, la diferencia entre la luz y la oscuridad era algo básico. Una era buena, la otra mala. De repente, las cosas ya no estaban tan claras. La oscuridad seguía siendo un misterio, algo oculto, algo de lo cual sentir miedo; pero había llegado a temer a la luz tanto o más. La luz revelaba todo, o parecía revelarlo. Con los ojos cerrados no veía más que oscuridad, lo que me recordaba a esa cosa, el mas profundo de mis secretos; con los ojos abiertos estaba el mundo que no lo sabía, luminoso, ineludible y que, de alguna forma, seguía existiendo.

Página 297

Redujo un poco la velocidad y volví a pensar en que nunca se conocía lo que se veía de un solo vistazo, en movimiento, al pasar. Bueno o malo, verdadero o falso. Siempre había mucho más de lo que se hallaba a la vista.

Página 351

Tiene que haber un medio. Sin él, nada puede estar completo, nunca. Porque el medio no sólo es el espacio entre dos cosas, sino que lo mantiene todo unido.

Página 360

Porque eso es lo que pasa cuando intentas huir del pasado. No es que te alcance: te supera y oscurece el futuro, el paisaje, el cielo mismo, hasta que no queda otro camino que el que conduce a través de él, el único camino que puede llevarte a casa.

Página 367

Vale, no han sido todas las frases que subraye pero algunas no tendrían sentido para las que no han leído el libro y otras daban un spoiler. Así que esas son algunas de las que he subrayado. Espero que les hayan gustado y me encantaría que me dejaran en los comentarios cual es su favorita.